Este breve-capítulo se llama: “Juguemos a esperar el momento perfecto”

Estaba Doña Ansiedad toda acelerada: “¿cuándo llega? ¿cuánto falta?”

A lo que Don Preocupación casi suspirando le dice: “Mmm.. ¿vos pensás que puede ser ahora, ahora, aahhoorraa? puede que sí pero y si en realidad no es el…?

Señora Control se subleva y tajantemente dice: “Yo hasta que no vea puesta la última ficha, digo que no es”.

Aprovecha entonces Señorita No-Merecitas: “Che, disculpen y perdón que me meta pero ¿no les parece que esperar eeeeeel momento perfecto es muchoesperar?”

Presencia hace ruido en la escena advirtiendo que ya estaba hace tiempo y con contundencia y amor expresa: “Mucho esperar de qué? o de quién? De la vida? Si la vida es ahora… está siendo. Y no hay un mañana comprado ni dadoporsentado”

Dice Geneen Roth que “la libertad es oir a las voces internas divagar, gesticular y sermonear y no creer ni una palabra”

Recordatorio: “El momento perfecto nunca llega y siempre es”

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